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| Camino de El Pedregal desde La Pereda |
En La Pereda, viniendo de La Espina, el Camino Primitivo ha entrado en el concejo de Tineo/Tinéu, llamado El Concechón por su gran extensión. Caminamos por la ladera de La Sierra, saliendo ya del pueblo en dirección a El Pedregal, pero pasando primero por las casería de L'Espín y Bedures, hacia donde nos dirigimos
El Camino en diversos tramos tiene una buena caja, señal de su antigüedad
Pasamos bajo unos árboles
Hay partes con buena sombra
Abajo la carretera AS-216 en los campos de La Veiga, es la gran planicie de la llamada "meseta de La Espina", una llanura verde campos relativamente llanos separados por sebes o setos silvestres con filas de arbolado. Luego va una colina alargada, La Sierra Idarga y más a lo lejos sierras más altas como las de El Courío y Bixega, sobre los valles del Narcea, en el suroccidente astur. A la derecha, después de Idarga otra sierre que es con una colina larga y casi en planicie, La Curiscada, que tendremos también a nuestra izquierda, al sur, hasta llegar a la villa capital del Concechón
Al fondo a lo lejos distinguimos las casas de La Miariega y El Pedregal
Atentos a la bifurcación
Hemos de ir, subiendo, por el ramal de la derecha. Estamos en la zona conocida como Las Matiegas
Veamos el mojón
En este cruce seguimos de frente y rectos, subiendo siempre
Flecha amarilla en un tronco a la izquierda
Un poco de empedrado
Una cancela
Salimos de un primer tramo arbolado. Abajo a la derecha vemos las casas de El Banderín. a la entrada (o salida) de La Pereda por la carretera
El gran investigador Juan Uría Ríu llegó en su momento a comparar esta meseta de La Espina con la castellana, si bien con la gran diferencia de dar vista a las altas cordilleras del Narcea
Los caballos se acercan a ver pasar a los peregrinos
Nos aguarda un buen repecho
El paisaje compensa plenamente el esfuerzo
Pastos de vacas lecheras
Paisaje ganadero
Se acabó la subida
Más mojones en el Camino
Vamos bajo los carbayos...
Que forman sus filas...
Un precioso camino en el verde...
Hay murias de piedra pizarrosa, medio cubiertas de musgo, donde también se incrustan los líquenes, tiñéndolas de gamas de diferentes verdes.
Majestuosa naturaleza...
Pasamos por lugares más sombríos y otros más luminosos, con menos árboles, pero igual de encantadores unos que otros
El rebaño...
Todas en fila, mirándonos
Seguimos ruta por esta senda, muy trillada por el paso continuo de peregrinos
Bajo la enramada...
Maravillosa sensación, rodeado de naturaleza
Muria y musgo...
Bosques y campos...
Abajo a la izquierda en la carretera vemos El Couto
A nuestra izquierda los campos caen en suave pendiente.
La gran meseta y sus suaves colinas tienen un límite al sur no muy lejano, de pronto caen abruptas sobre el valle del Narcea, formando un paso natural labrado por el río, que no vemos desde aquí, pero sí las altas serranías del otro lado, muralla natural hacia las cumbres de la cordillera y los valles de Miranda, Somiedo, Cangas y Xinistaza, al sur del Concechón
Senda preciosa, sin apenas cuestas, siempre en ladera...
Árboles y arbustos.
Hierbas y flores.
Campos abiertos hasta donde abarca la vista, con El Couto abajo y La Curiscada enfrente
Campos luminosos...
Y umbría forestal
Frescor de la naturaleza
Pasan los peregrinos
La magia natural del bosque autóctono...
Uno de los caminos por excelencia de la ruta.
Alambradas de fincas en tramos más abiertos que miran a las sierras del Narcea.
El Picu l'Horru o Pena Manteiga
Otro mojón caminero
Y otra parada para escudriñar el paisaje
En la lejanía Casa Burrón, Casa'l Moreno, campos de Las Vacauras, vegas del río Vauregueixu, a la izquierda de La Curiscada. Más allá el profundo tajo pedregoso del río Villanueva, donde están las viejas canalizaciones del Rañadoiro llamadas precisamente Las Antiguas. También vemos el profundo tajo que cae hacia el río Narcea así como las lejanas montañas de La Sierra Bixega
La Sierra Bodenaya o Boudenaya sigue atrás, antenta a nuestros pasos...
Amplitud de miras en tan soberbio panorama...
Pasan junto al mojón más peregrinos
Inmortalizando el momento...
Y luego prosiguiendo ruta
Por ahí vamos ahora nosotros
Al fondo, en Ondinas, aquellas grandes fincas roturadas son señal que están plantando el maíz. Más allá son las camperas de Las Llanas, Las Cáscaras y La Sierra Idarga
La bajada es suave, no muy pronunciada
Ya estamos a la altura de las casas de El Couto, al fondo La Curiscada
Están marcadas las rodadas de los tractores
Más allá son los campos regados por el río Modreiros, con La Curiscada siempre al fondo
La muria da paso a las chantas, las piedras hincadas
La piedra pizarrosa y sus aprovechamientos
Trecho llano
El Pedregal a lo lejos
Abajo a la izquierda esa nave ganaderas es ya L'Espín
Ya vemos las casas
Y en medio una gran panera restaurada
L'Espín, casería de la parroquia de La Pereda
El gato es quien primero advierte nuestra presencia...
Es en principio mucho más higiénico esto que meterse por los prados a hacer las necesidades pero su estructrura choca enormemente con este bucólico entorno rural. Tal vez sea un ejemplo de una cierta masificación del Camino.
Una panera restaurada, bajo ella hay, en la bodega o almacén, se ha habilitado un lugar de descanso, con máquinas de autoservicio
Una concha a la puerta marca la ruta
Casa Patacón, el gato nos acompaña unos metros
Flechas frente Casa Patacón
Lavadero fuente y abrevadero frente Casa Patacón.
La pila del agua...
Y ahora a Bedures
Abajo en la carretera La Miariega
Y El Couto
Más allá El Pedregal, hacia donde nos dirigimos.
Bedures. Se dice que los antiguos señores rurales o fidalgos de la zona se repartían entre ellos las tierras que llevaban o negociaban con los monjes, pues también fue esta propiedad eclesiástica, principalmente de la propia parroquia, del monasterio de Courias y de los fidalgos de El Pedregal, para donde se encaminan ya nuestros pasos.
Ovejas de Bedures, la reciella o ganado menor
Grandes establos
En Bedures estuvo la casona solariega de los Colado, que luego se trasladó a El Pedregal
Las casas se extienden a lo largo del Camino. Es su parte posterior
Pajares
Hórreo y lavadero
Un lavadero cubierto
El cañu del agua.
Cruce y a la izquierda
Vamos hacia aquellas casas
Mojones y flechas que lo indican
Guardián del Camino que se asoma a vernos pasar
Guardián de la finca... ¡no te atrevas a subir! parece decirnos
Bajamos un poco...
El Camino sale de Bedures, bajo los castaños y los molinos...
Los molinos de El Regueirón, sobre el Camino a la derecha
Y así seguimos ruta
Bajo la boscosa ladera de La Sierra, al pie de Argumón
A la sombra de los castaños
El castañéu
Maravillas de la naturaleza en el Camino
Peregrinos y vecinos
Salimos al camino que va a Argumón. De mano subimos unos metros a la derecha
Pero nos desviamos inmediatamente por esta senda a la izquierda
El el cruce de Argumón nos parece encontrar al "diablo peregrino" en forma de cabrón, macho cabrío, junto al mojón
El Pedregal, otro hito de la historia del Camino al que vamos a entrar y que vamos a conocer..
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