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| Abajo Vallinaoscura, en medio Villarrica y en lo alto Lluaria. Subida de Valdediós a La Campa |
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| Camino de Valdediós a Vallinaoscura |
Pasamos así un pequeño puente sobre el río Valdediós, uno de los que conforman el valle
A la derecha hay un pequeño área de descanso con una mesa y banco de madera entre un lavadero y lo que parece una antigua casilla de peones camineros, dedicados al arreglo y mantenimiento de los caminos
El lavadero de Santi fue rehabilitado en noviembre de 2018 por los propios vecinos y la colaboración del Ayuntamiento de Villaviciosa
Una placa colocada a tal efecto lo recuerda
Pasamos así La Casilla
Y llegamos a una encrucijada
Es el cruce de El Polléu, en el que seguimos de frente
Es la ruta a Vallinaoscura
El Camino serpentea, encajado entre paredes naturales de tierra
Y sube levemente, al principio casi sin darnos cuenta, entre tierras de labor. Aquí se ha plantado maíz
Vista de Santi
Quintana con casa y panera
Boscaje...
Prados de siega: a nuestra derecha La Parea del Peñéu y Monte Valdediós
Yegua y potro
Al sur la boscosa ladera norte de La Llomba, monte que se extiende de este a oeste y que separa el valle del río Valdediós del Valle del Nora, paso franco a la capital asturiana seguido históricamente por los romeros que se dirigen a la ovetense catedral de San Salvador para venerar sus reliquias, continuando luego a Santiago de Compostela, haciendo caso de aquella máxima medieval que dice---
"Quien va a Santiago
y no al Salvador
visita al criado
y olvida al Señor"
En una cueva cercana y mezclados con huesos de animales, fueron hallados en mayo de 1878 los célebres cráneos de Valdediós, de origen prehistórico, pertenecientes al individuos cromañones y estudiados por el historiador Juan Uría Ríu, testimonio del antiquísimo poblamiento del valle desde la remota prehistoria
Además de prados hay pomaradas para manzana de sidra... no en vano se dice que Villaviciosa es la "capital manzanera" de España
Todas estas tierras eran parte del coto monástico de directa propiedad del monasterio de Valdediós, si bien su dominio abarcaba un territorio mucho más extenso, con colonos y vasallos que les tributaban
En noviembre de 1413 los vecinos de Sariegu, escarmentados por los abusos señoriales de los cistercienses entraron aquí...
"con amonestación del Diablo, et con malos pensamientos que les vinieron a sus corazones, non temiendo a Dios, nin a las penas que los derechos ponen, nin a la justicia de nuestro señor el Rey, e con grande osadía, con lanzas, e con escudos, e espadas, e con otras armas a la hora de las Vísperas tomaron e levaron muchos ganados..."
Se trataba de una de las revueltas antiseñoriales que en la baja Edad Media acontecieron en Asturias por cuestiones de pagos y tributos a los señores. Valdediós seguiría ejerciendo un férreo control administrativo del territorio durante siglos
Estos campos fueron testigo de aquellos violentos episodios que pasaron a la historia de estos concejos...
Continuamos a la sombra de castaños, carbayos, nogales y fresnos...
Y a los lados más fincas...
Muy arriba a nuestra izquierda va la Carretera la Campa (AS-267). Su construcción estuvo llena de avatares, pero cuando se abrió definitivamente en el verano de 1852 ocasionó el abandono de los milenarios caminos reales salvo para comunicación interior entre aldeas y fincas. Por la carretera, como su nombre indica, podían circular ya todo tipo de carros, con mercancías y viajeros, incluso diligencias. En los caminos antiguos sólo en algunos contados tramos, todo era a pie, a caballo, o con recuas de mulas
Estribaciones occidentales de La Rasa de Arbazal coronadas por especies de crecimiento rápido. Los eucaliptos, traídos primeramente como árbol ornamental, fueron pronto aprovechados para la construcción y la minería. La industria maderera se incrementó con la papelera y ello ocasionó estos grandes monocultivos en buena parte del norte de España, favorecido además por el éxodo rural y el abandono del campo y los antiguos pastos comunales
Praderías de intenso verdor bajo La Campa...
Poco a poco la subida se va haciendo un poco más pendiente...
El Camino hace una curva a la izquierda, ya empieza a zigzaguear para ganar altura
Un buen recuesto viendo los bosques de eucaliptos al este
Ahora curva a la derecha. En este tramo el suelo está hormigonado, es mejor que el asfalto para evitar resbalones, sobre todo el ganado herrado...
Y ya llegamos a Vallinaoscura, topónimo relacionado con la zona de más umbría de lo más angosto del valle, pues popularmente se dice que durante seis meses al año no le da el sol
Pasamos así junto a la primera casa...
El hábitat es concentrado, aprovechando el espacio en esta ladera. Las viviendas se agrupan formando una quintana, extendidas a lo largo del Camino
Vallinaoscura tiene a gala ser productora de las delicias de la huerta de Valdediós, siempre apreciadas en el mercado de Villaviciosa
El Camino se estrecha un poco, encajonado entre una casa y la muria de una finca
Aquí hay una explanada donde se concentran la mayor parte de las casas en un cruce de caminos
También hay un pequeño pero muy destacado conjunto de hórreos
Hórreos engalanaos con macetas y flores
Y también donde maduran los mencionados y apreciados frutos del campo de Vallinaoscura
Algunas iniciativas vecinales han recuperado tradiciones y costumbres que durante tiempo estuvieron perdidas, como el Antroxu o carnaval asturiano, haciendo máscaras y gorros cónicos con cintas de colores, picando a la puerta de cada casa y siendo obsequiados con fayuelos (también frixuelos, a manera de los crepes)
Pese a que quedan muy pocos habitantes buena parte de las casas han sido rehabilitadas
Esta pequeña llanada viene a ser el centro de Vallinaoscura: nosotros hemos de ir a la derecha
Caminamos hacia aquellos hórreos al fondo
Es Vallinaoscura patria del célebre gaitero José Antonio Lozano, nacido en 1926, que acompañaba a la gaita misas y romerías en todo el concejo, a veces con su hermano Eladio, que sería presidente de la Coral Capilla de la Torre de Villaviciosa. También realizaba la puya'l ramu, subasta para sufragar las fiestas, y era un ponderado constructor de carros para bueyes. Fallecido en 2010, se le han tributado merecidos homenajes. El nieto de José Antonio Lozano, Simón San José, sigue trabajando en el mismo taller de su abuelo fabricando y reparando tambores y panderetas
Caminamos al lado de más hórreos
Un par de hórreos de corredor en medio de las casas, como era muy habitual en estos casos
La escalera de piedra o subidoria
Pueden tener más de un propietario, a veces se denota en ciertas diferencias en el mismo hórreo, como por ejemplo que una parte tenga corredor y otra no
Junto a los hórreos empezamos otra cuesta
Subimos entre las casas...
Puerta de la cuadra, el establo del ganado
Y en el cruce subimos a la derecha. Fijémonos bien pues siempre hay alguna flecha amarilla pintada
Y por aquí salimos de Vallinaoscura
Comienzan las rampas más duras hasta La Campa subiendo a la siguiente aldea, Villarrica
El valle ya va quedando a nuestros pies
Valle de Valdediós y el gran valle de Rozaes, Boides en la Edad Media, la Tierra de Maliayo. Boides cambió su nombre por el de Valdediós al asentarse en él los cistercienses en el siglo XIII, pues gustaban de evocar en los topónimos a la divinidad. Por otra parte, con la fundación de la Pola de Maliayo también esa centuria, se buscó un nombre para la nueva población que atrajese a nuevos vecinos, escogiéndose el de Villaviciosa con el significado de villa fértil
En la subida a Villarica admiramos al norte el Cordal de Cañéu, paso al valle de Pión por el Altu la Cruz subiendo de Niévares arriba. Allí a la izquierda del monte Curiella (535 m) está el Altu la Cruz, por donde suben los peregrinos que, desde el cruce de Casquita, al sur de Amandi, escogieron tomar rumbo a Gijón-Xixón. Es también la ruta de peregrinaciones del Camín Xixón-Cuadonga/Gijón-Covadonga, si bien en sentido inverso
Tras nosotros, una vista de Vallinaoscura...
Los tejados asomando entre la arboleda, al pie de La Campa...
Las casas, los hórreos y las paneras...
Subimos junto a la torre de la luz...
Tenemos desde aquí más excelentes vistas de las montañas que cierran el valle por el sur
Monte de Valdediós y alturas de Peñacalva (502 m)
Allí está La Viña, topónimo que delata donde estuvieron las viñas del monasterio de Valdediós, si bien hace siglos que han desaparecido las cepas
La Viña concentra también sus casas en la ladera de la montaña y en los cruces de los caminos que bajan al valle. Por allí va La Riega'l Gorgoyu, afluente del río Asta o Valdediós. El topónimo Asta es muy importante: de discutido origen, se le relaciona comunmente con el celta "stour" (río) y se vincula a ciertos cursos fluviales, como el río Astuera en Colunga o el Esla, antiguo Ástura, el Stur citado por el historiador Plinio el Viejo en Bretaña, el Stör, antiguo Sturia en la desembocadura del Elba, o el Stura en el Piamonte, donde estaba la gentilidad celta de los esturi. Los topónimos Asturias, Astorga (Astúrica Augusta) y Estiria tendrían este origen y tal vez incluso el nombre del pez esturión. En gaélico ster y el bretón stour siguen conservando la palabra en su significado de río
Este valle fue el escogido por Alfonso III El Casto para construir su palacio en Valdediós, alejado de la corte pero a la vez bien comunicado. Se sabe que cazaba y meditaba en estos parajes, retirándose cuando era mester de las inmensas tensiones de su convulso y violento tiempo. Ya en el lugar había villas romanas y en las cercanías castros ástures...
De frente La Parea'l Peñéu, estribaciones de La Llomba...
Parajes frondosos en nuestro más inmediato entorno...
Más vistas hacia La Viña. al norte...
Se distinguen bien parte de los edificios del claustro y la hospedería, además de la espadaña de la iglesia de Santa María
Más allá, en medio del valle de Rozaes la larga recta de la Autovía del Cantábrico y las casas de Conceyeru, entre Pueyes y Rozaes. Algo más arriba La Torre de Niévares, a cuyos pies sube el otro camino oficial en dirección a Gijón/Xixón y bajar la ruta a Covadonga. Encima a su derecha El Pedrosu, en la N-632
Al menos en días de sol la umbría de algunos tramos no da una deliciosa sensación de frescor...
Y así continuamos por este hermoso bosque...
Castañales y nozales...
Más paisajes de Valdediós y el monasterio
Y sigue el prolongado ascenso
Siempre bajo la arboleda...
Subida recta y directa
Tramo a pleno sol...
Otra torre eléctrica
Casi puede decirse que no entramos en la aldea pues, nada más llegar "a sus puertas", seguimos la subida por el camino de la izquierda, ladera arriba
Monte arriba el Altu Lluaria, en las cimas de La Llomba...
Las casas de Villarrica forman una calle en la falda de La Llomba, a medio camino entre la cumbre y el valle
Llegada a Villarica... que "nin ye villa nin ye rica", según dicen algunos vecinos. El nombre tiene más bien que ver con la riqueza de su emplazamiento para huertas y frutales. Estos términos fueron antaño una verdadera despensa del monasterio
Curva a la derecha
Por allí baja La Riega Fondalín, otro afluente del Asta o Valdediós
Curva muy pronunciada que comienza otro buen repecho
Volvemos a disfrutar de un poco de sombra
Villarrica y Valdediós: los topónimos villa hacen referencia a antiguos poblamientos. Fundaciones medievales o anteriores, incluso romana. Estos parajes estuvieron habitados, como hemos visto, desde la más remota noche de los tiempos
Al estar más altos va ampliándose la perspectiva. Ahora al norte, luego de El Pedrosu y La Cobertoria, el Pelapotros o Monte Cabañes (408 m). Ese cordal da paso a Les Mariñes, la rasa costera al noroeste del concejo de Villaviciosa, por donde hubo un ramal más costanero de camín real, por donde se tiene registrado en paso de peregrinos en siglos pasados. No ha sido en cambio catalogado, ni recuperado ni señalizado, pues a partir del siglo XVIII cayó en desuso al ser más corto el del Altu la Cruz. Era popularmente llamado, para diferenciarlo de otros, el Camín Real de les Mariñes...
Abajo, a la izquierda del convento, La Rivera, por donde vinimos valle arriba desde Castiellu Ambás
Valdediós y sus dos claustros. Uno es clasicista y tiene tres alturas, si bien la planta baja es del siglo XVI, la primera del XVII y la tercera del XVIII. El otro pertenece a la hospedería y no reviste un especial interés arquitectónico
Fuerte recuesto...
Suben los peregrinos...
Valdediós a vista de pájaro. Ahora, más allá del collado de El Pedrosu, donde se unen el Monte la Cobertoria y el Cordal de Cañéu, vemos un poco el horizonte azul del Mar Cantábrico...
En el monasterio se ven mejor los claustros y la iglesia del monasterio de Santa María. Un poco tapado por la espadaña, más atrás, está El Conventín de San Salvador.
En medio del valle las parroquias de Camoca, Grases y Niévares. Más allá Cazanes y Berdiñana
Vuelta a la derecha...
Nos acercamos a lo alto...
Ahora, arriba, al oeste, veremos unas casas...
Lluaria, extendido a lo largo del camino que atraviesa La Llomba de oeste a este y que pronto se cruzará con este. A unos 540 metros de altitud, es uno de los pueblos más altos de Villaviciosa y con mejores vistas. Allí nace la riega de La Forquera, en La Fuente Castañón, afluente del río Rozaes. En la zona están los pozos de Los Maderos, La Quinta y La Quintona, frecuentados por espeleólogos y centro de leyendas. Una leyenda dice que antes estaba más abajo, en El Caminón, el viejo paso hacia el valle, donde ahora están los prados de El Prau la Campa y El Palombar
Cuenta con capilla propia, construida por un vecino en el año 1914: allí están El Campu y Casa Pepe, donde tenía fragua Luis el Ferreru, La Fuente Lluaria, Casa Albino y Casa Alfonso (junto a la capilla), Casa Juan, el solar de la antigua Casa la Perlora, Casa Joselín, Casa Vicente, Casa Sandalio... y unas cuantas más
En las alturas de La Llomba...
Abajo ya asoma un poco más El Conventín, al otro lado del monasterio, por donde viene el camino de La Rivera y por donde baja la carretera al convento
Y así vamos saliendo del bosque hacia los campos de La Campa...
Últimos metros de subida
A la derecha de Valdediós la subida a La Campa por Arbazal
Bajo el Picu Lloses (455 m) y La Rasa Arbazal, otra campera de pasto y braña
Podemos ver la Carretera la Campa y, más arriba, al pie de las praderías de la cima, el otro camino, el que sube a La Campa por Arbazal viniendo de San Pedru Ambás y Castiellu, donde se ha seaparado de este
Realmente, reiteramos, era este el camino antiguamente más empleado para subir a La Campa, el camín real, Valdediós estaba en un lugar un poco más aislado, como así gustó a Alfonso III El Magno y luego a la Orden del Císter para establecerse en el valle
La fuerte cuesta tiende a suavizarse...
Y ya vemos las primeras casas de La Campa...
Allí está el final de la cuesta
Al este otra panorámica de La Rasa de Arbazal
Zona de pasto y braña
Allí asoman los tejados del pueblo
Tal vez podamos reconocer el campanario del templo de Santa María de Arbazal y, a su izquierda, el tejado del antiguo mesón de los cistercienses, fundado por ellos en ese camino para atender a viajeros, arrieros y peregrinos, construido en 1640
Ese camino sigue de Arbazal en llano por la falda de las praderías del fondo para unirse a este en La Campa
Llegamos a La Campa
Allí están las casas de la carretera, donde se unen ambos caminos
Bifurcación y de frente y recto
Pasamos al pie de Casa Aurelio
Y terminamos en la carretera de Lluaria, hecha por los propios vecinos a sestaferia, el trabajo comunal del sexto día (sábado), la sexta feria
Y ya tenemos de frente La Campa, en la carretera. Allí más atrás a la izquierda llega el camino procedente de Arbazal, bajo los prados de Santa Mariña (479 m), donde se celebraba antaño la feria de Santa Mariña, en el campo de una desaparecida capilla de esta advocación
"Si de La Campa baxa a beber la borrina a la Fuente Mazagüé, ye señal que va a llover"... dice la frase popular. Pues cuando la niebla cubre La Campa hasta el valle se dice augura mal tiempo
Ahí en el cruce con la carretera hay una gran explanada con aparcamientos
Y es que antes que se hiciese la Autovía del Cantábrico con sus ramales todo el tráfico pasaba por aquí. La subida por la carretera La Campa, con sus curvas, era cansina, y caminoneros, automovilistas y moteros hacían muchos una parada aquí en El Mariñán, fundado en 1945, célebre bar de carretera, cerrado hace unos años
Echamos en falta este bar y casa de comidas donde la mano de Elvira, hija de los fundadores del negocio, hacía gala de su buen hacer con los pescados, el cordero, las fabadas, potes, arroces, hígado encebollao, callos, arroz con leche y tartas caseras, excelencias culinarias que satisfacían los paladares más exigentes y ayudaban a recuperar fuerzas para proseguir ruta, pues como decía Rocío Monestina, sucesora de Elvira luego de casarse con su nieto Tino, "No puede ser que la gente marche con fame y todavía menos los que trabajan"... a lo que añadiríamos nosotros "y los que caminan". No pocos peregrinos de todo el mundo recuerdan y añoran El Mariñán
Ya no están ni Elvira, ni Rocío, ni Tino, ni las célebres cocineras Marisol y Carmen, e incluso "La Gasolinera la Campa" ha cerrado sus instalaciones, que languidecen en ruinas
Avanzamos así por la explanada con idea de cruzar la carretera hacia las casas del otro lado, a cuya derecha sigue el Camino
El tráfico no es tan abundante como antaño pero hay bastante, y suele pasar veloz, la calzada es aquí bastante ancha, se cruzan carreteras y hay que ir con bastante atención. Enfrente estuvo primeramente El Mariñán
Busquemos para cruzar el sitio con más visibilidad
Estamos pasando al conceyu de Sariegu
Al otro lado seguimos de frente por la Carretera L'Enguilu (AS-357)
Andamos por ella media docena de metros...
Y aquí nos unimos al camino que viene de Arbazal, desviándonos a nuestra derecha por La Caleya la Campa para enseguida emprender la bajada al valle de Sariegu, el gran Valle del Nora, camino de La Campa a Figares
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